Miles de personas, llegadas desde diferentes puntos de la provincia de Salamanca y de la comarca cacereña de Las Hurdes, han acudido hoy al Santuario de la Virgen de la Peña de Francia para rendir culto a la "Virgen Morena".
La asistencia ha sido tan masiva que los aparcamientos en el entorno del santuario, controlado por la Guardia Civil, se han agotado a las 11.00 horas, una hora antes de que el obispo de Ciudad Rodrigo, Atilano Rodríguez, oficiara la misa en honor a la Virgen de la Peña de Francia.
Muchos de los que habían acudido en coche, tuvieron que dejar el turismo en la zona del Paso de los Lobos, a 4 kilómetros del santuario, y realizar a pie el último tramo.
Desde primera hora de la mañana e, incluso, durante toda la madrugada, el dominico Padre Ángel ha estado recibiendo en el santuario a peregrinos y devotos que se acercaban a besar a la virgen, de tez morena.
Es el caso de un grupo numeroso de peregrinos que salieron la tarde del martes desde Ciudad Rodrigo y que llegaron a la cima de la Peña de Francia, a 1.723 metros de altitud, sobre las 5 de la madrugada, tras recorrer a pie más de 40 kilómetros.
Llama la atención que los hombres de la comarca cacereña de Las Hurdes asisten a rendir culto a la Virgen con un ramo de albahaca detrás de la oreja, ya que "es lo que distingue a estas gentes del norte de Cáceres", como ha explicado hoy a EFE el escritor salmantino afincado en León, José Luis Puerto, que, entre sus trabajos cuenta con varios poemas en honor a esta Virgen.
Matilde Sánchez, una mujer septuagenaria de Pinofranqueado (Cáceres) ha explicado hoy a EFE que ella viene cada 8 de septiembre al santuario desde que tenía 7 años, y recuerda como, cuando era joven, "realizaba la ascensión a lomos de un burro, con su familia".
Las promesas son también motivo de peregrinación, tal cual han hecho hoy el matrimonio Emilia García y Crescencio Pereira, vecino de El Maíllo (Salamanca), que han realizado toda la ascensión a pie, para pedir que su hija se sane.
También han acudido de otros puntos de Castilla y León y algunas gentes llegadas de Portugal como, por ejemplo, las del Club Lector Norte de Castilla (Valladolid), que se ha acercado al santuario en autocar.
Según ha relatado hoy a EFE el obispo de la diócesis de Ciudad Rodrigo, Atilano Rodríguez, toda esta devoción se debe a las Misiones Populares, que llevaban en procesión a la Virgen de la Peña de Francia por todos los pueblos del oeste de Salamanca y del Norte de Cáceres.
Estas misiones de evangelización fueron desarrolladas, de manera especial, por el dominico Padre Constantino en la década de 1960, cuando estuvo al cargo del santuario.
Ahora, el verdadero valedor es el Padre Ángel, que pasa todo el año en solitario cuidando del santuario, a pesar de que cuando llega el invierno pasa muchas semanas aislado por la nieve.
Un año más, la comunidad religiosa, incluido el propio obispo de Ciudad Rodrigo, ha lamentado el mal estado de la carretera en los últimos cuatro kilómetros de ascensión, que la hacen poco transitable.
"Y eso que es uno de los sitios de toda la región con mayor número de visitantes, ya que todos los días llegan peregrinos a ver a la Virgen", como ha reconocido el Padre Ángel. EFE
1 comentario:
Como te lo curras.
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